La verdad es que la intervención no me asustaba mucho. Lo que más respeto me daba, como siempre, era que me tuvieran que clavar una aguja.

Después de todo este proceso, que me saquen sangre lo estoy llevando bien. Pero es que la anestesia te la pinchan en la mano. No me gusta nada.

Cuando llegué estaba muy inflamada y llevaba desde el día anterior molestándome mucho los ovarios. Como si te fuera a venir la regla o la tuvieras. Me molestaba incluso al sentarme, moverme, caminar… Así que lo primero que pregunté era si eso era normal.

Me tranquilizaron explicándome que sí, que era totalmente normal y que había gente que ni siquiera era capaz de caminar medio normal. Que tienen que estar muy hinchados para que puedan pincharlos. Y que después de la intervención sentiría cierto alivio, pero que no lo sentiría del todo hasta que me viniera la menstruación.

La verdad es que no lo había pensado, pero yo me he saltado una menstruación. Porque todo lo que hacen es para mantenerte los óvulos creciendo dentro y evitar que ovules.

Cuando llegué estaba bastante cansada. He de decir que yo, cuando me molesta algo corporalmente, tiendo a cansarme y mi cuerpo quiere dormir. Imagino que para no tener que sufrirlo. Así que me medio dormí sobre el hombro de Erik mientras esperábamos.

Cuando me hicieron pasar, me quité toda la ropa. Me dejaron quedarme con los calcetines y lo agradecí, porque yo soy muy friolera. Luego te pones una de esas batas que se atan por detrás, gorrito, patucos y lista.

La anestesia

Me hicieron pasar a una sala donde el anestesista me hizo algunas preguntas que ya me advirtió que me habrían hecho en algún otro momento. Otras eran para asegurarse de haber hecho el ayuno. Porque no puedes comer nada hasta 6 horas antes. De hecho te dicen que hagas un desayuno fuerte hasta las 9h y luego ya solo puedes beber agua o zumo de manzana. Me sorprendió lo del zumo de manzana, aunque yo solo bebí agua. Y dos horas antes ya no puedes tampoco beber.

Otro dato interesante que me comentaron fue que bebas mucho ese día, porque al hacer la extracción también se llevan líquido y te deshidratas. Así que beber mucho y estar muy hidratada ayuda a no tener luego nausas.

La anestesia para mí fue lo peor, aunque ya iba preparada y lo sabía. Me pinchó y te dejan un plastiquito para meter el líquido. Yo ponía caras y respiraba raro porque me da mucha grima. En seguida me preguntaron si me dolía y les dije que no, que era solo la sensación de notar algo, que me daba mucha cosa, pero que estaba bien.

Lo siguiente que recuerdo es notar el líquido. Sí, notas el líquido cómo te sube por el brazo. A mí me da muchísima cosa.

El despertar

Me habían dicho que me despertaría en el quirófano y luego me dejaban en una sala hasta que pudiera irme. Yo me desperté directamente en la sala.

Con mucho sueño, queriendo dormir y a la vez irme a casa. No podía dejar de tener en mente hacerme una bolita en el sofá. Cómoda, calentita, en casa. Era lo único que me venía a la mente.

Me fui despertando y al rato llegó otra chica. La otra chica sí venía despierta por el pasillo aunque también soñolienta. Comentaba que solo tenía ganas de dormir y lo cansada que estaba. Que se ve que es muy normal.

La enfermera me dio agua y luego unas galletas para que comiera. Me las comí y solo quería levantarme e irme a casita, al sofá, acurrucarme.

Me explicó que primero me sentaría y cuando estuviera estable me levantaría. La verdad es que no tardé mucho. Al rato ya estaba sentada al borde de la cama, me preguntó si estaba bien y me ayudó a ponerme de pie por si acaso.

Sentía que tenía como un poco de vértigo, muy poquito. Lo bueno es que sé disimular este tipo de cosas por el baile.

Caminé hasta la salita donde estaba mi ropa y me pude cambiar por fin.

Cuando salí, en la recepción me dijeron que Erik y mi madre no estaban. Normal, si tenían que esperar ahí un tiempo completamente indefinido… pues se fueron a tomar algo. Iba a llamarles cuando enseguida se ofreció la chica y se puso a llamar a Erik.

La bióloga

Tuvimos que esperar a que nos atendiera la bióloga para explicarnos qué habían obtenido y los siguientes pasos. Yo me caía de sueño.

Nos explicó que habían extraído 10, de los cuales 9 eran maduros. Y que me llamaría al día siguiente para darme más detalles.