DÍA 2
¿Has jugado alguna vez al buscaminas? Pero… ¿has jugado conociendo las normas o sin conocerlas?
Yo no sé a vosotras, pero a mí conociendo las normas ya me explotaban minas… Imaginad sin conocer las normas.
Pues eso mismo pasa con el síndrome de la impostora, ¿conoces las normas con las que juega la impostora? Si no las conoces, la puñetera te ataca sin previo aviso. Y no, ¡no te explica sus normas!